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 Capítulo 26


XIV. Juicio a la ciudad de Tiro y Sidón.

A. Juicio a Tiro por compararse con Jerusalén.

1. Juicio por el orgullo y la maldad de Tiro.

a. 26:1 Aconteció en el undécimo año, en el día primero del mes, que vino a mí, palabra de Jehová, diciendo:

b. 26:2 Hijo de hombre, por cuanto dijo Tiro contra Jerusalén: Me alegro de lo que le pasa. Con ironía, se expresa diciendo: Está quebrantada la que era la puerta de las naciones. La que era como soy yo. Pero ahora ella está desierta. Sin embargo, yo estoy poblada, con muchos recursos y bienes.

“A Dios le desagrada la comparación que hace Tiro de Jerusalén y ella, que la pone en su mismo lugar, vuelta como ella. Pero Dios la juzga, porque se enorgullece tanto de su esplendor, que se quiere hacer igual a Dios, se halla en ella maldad. Sin embargo, esta maldad no es por los hechos abominables, sino por endiosamiento. Es decir; querer ser igual a Dios” 28:15.

2. Dios levantará a las naciones contra Tiro.

a. 26:3 Por tanto, así ha dicho Jehová el Señor: Mira, yo estoy contra ti, oh Tiro, y así como el mar hace subir sus olas, haré subir contra ti muchas naciones.

b. 26:4 Demolerán los muros de Tiro, y derribarán sus torres. Barreré de ella hasta su polvo, y la dejaré como una peña lisa.

c. 26:5 Tendedero de redes será en medio del mar. Y será saqueada por las naciones. Porque yo he hablado, dice Jehová el Señor.

d. 26:6 Sus hijas que están en el campo, las matarán con la espada; y sabrán que yo soy Jehová.

B. Nabucodonosor, Rey de reyes, destruirá a Tiro.

1. La ciudad de Tiro es destruida por los Babilonios.

a. 26:7 Mira, que el norte lo traigo yo contra Tiro, a Nabucodonosor, rey de Babilonia, Rey de reyes, con caballos, jinetes, carros, con las tropas de muchos pueblos. Porque así ha dicho Jehová el Señor.

b. 26:8 Matará con la espada a tus hijas que están en el campo. Pondrá torres contra ti de sitio, levantará contra ti baluarte, y se reforzará con escudo contra ti.

c. 26:9 Vendrán contra ti con mandarrias, contra tus muros, y tus torres caerán destruidas con las hachas.

d. 26:10 Por la multitud de sus caballos, te cubrirá el polvo que ellos levantarán. Por el estruendo que hacen las ruedas de la caballería, de sus carros, temblarán tus muros. Cuando entre por tus puertas, tus muros estarán sentidos como una ciudad destruida.

e. 26:11 Con los cascos de sus caballos hollará todas tus calles; a tu pueblo matará a filo de espada. Tus fuertes columnas las destruirán y caerán a tierra.

f. 26:12 Tus riquezas serán robadas por ellos, y tus mercaderías te la quitarán. Arruinarán tus muros, y tus preciosas casas la destruirán. Pondrán tus piedras, tu madera y tu polvo en medio de las aguas.

g. 26:13 Se acabará tus escandalosas canciones, y no se oirá más el sonido de tus cítaras.

2. La ciudad de Tiro dejará de existir.

a. 26:14 Te pondré como una peña lisa, tu estado será como las piedras donde se tienden las redes, y nunca más serás edificada. Porque yo Jehová he hablado, y lo cumpliré, dice Jehová el Señor.

b. 26:15 Así ha dicho Jehová el Señor a Tiro: ¿No se estremecerán las costas al estruendo de tu caída, cuando griten los heridos, cuando se haga la matanza en medio de ti?

c. 26:16 En ese momento, todos los príncipes del mar descenderán de sus tronos, se quitarán sus mantos, y sus ropas bordadas, y quedarán desnudos, de espanto, se sentarán sobre la tierra, temblarán a cada momento. En tu tierra quedarán atónitos.

d. 26:17 Compondrán sobre ti lamentos, y te dirán: ¿Cómo pereciste tú, poblada por gente de mar, ciudad que era alabada, que era fuerte en el mar, ella y sus habitantes, que infunden terror a todos los que la rodeaban?

e. 26:18 En ese momento, se estremecerán las islas en el día de tu caída. En ese día, las islas que están en el mar se espantarán a causa de que ha llegado tu fin.

f. 26:19 Porque así ha dicho Jehová el Señor: Yo te convertiré en ciudad asolada, como las ciudades que no se habitan. Subirá sobre ti el abismo, y las muchas aguas te cubrirán.

g. 26:20 Te haré descender con los que descienden al sepulcro, con los pueblos de otros siglos, y te pondré en las profundidades de la tierra, como los desiertos antiguos, con los que descienden al sepulcro, para que nunca más seas poblada; y tengas gloria en la tierra de los vivientes.

h. 26:21 Te convertiré en espanto, dejarás de existir; serás buscada, y nunca más te hallarán, dice Jehová el Señor.


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