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 Capítulo 43

XXIII. La gloria de Dios entra a la casa de Dios.

A. La gloria de Dios entra por la puerta de oriente.

1. La gloria de Dios llena la casa.

a. 43:1 Me llevó luego a la puerta, a la puerta que mira hacia el oriente.

b. 43:2 Mira, la gloria de Dios de Israel, venía del oriente; su sonido era como el sonido de muchas aguas, y la tierra resplandecía a causa de su gloria.

c. 43:3 El aspecto de lo que vi era como una visión, como aquella visión que vi, cuando me fue mostrada la visión para destruir la ciudad. Las visiones eran como la visión que vi junto al río Quebar; y me postré sobre mi rostro.

d. 43:4 La gloria de Jehová entró en la casa, por la vía de la puerta que daba al oriente.

e. 43:5 Me alzó el Espíritu y me llevó al atrio interior; mira, la gloria de Jehová llenó la casa.

2. El lugar del trono de Dios.   

a. 43:6 Oí uno que me hablaba desde la casa; y un varón estaba junto a mí.

b. 43:7 Me dijo: Hijo de hombre, este es el lugar de mi trono, el sitio donde posaré las plantas de mis pies, en el cual habitaré entre los hijos de Israel para siempre; y nunca más será profanada la casa de Israel, mi santo nombre, ni ellos, ni sus reyes, con sus fornicaciones, ni con los cuerpos muertos de sus reyes en sus lugares altos.

“Dios salió del templo cuando Jerusalén fue quemada. Cuando se construya otra vez el templo. Dios permanecerá en él siempre, y cuando, no lo profanen. Con sus abominaciones y fornicaciones idólatras.

B. Profanación y destrucción del primer templo.

1. Contaminaron el templo con sus abominaciones.

a. 43:8 Porque poniendo ellos su umbral junto a mi umbral, y su contrafuerte junto a mi contrafuerte, mediando sólo una pared entre ellos y yo, han contaminado mi santo nombre con sus abominaciones que hicieron. Por tanto, los consumí en mi justicia.

C. Saquen sus ídolos, abominaciones y fornicaciones. 

1. Para que Dios habite en medio de Israel para siempre.

a. 43:9 En ese tiempo, cuando arrojen lejos de mí sus fornicaciones idólatras, y la idolatría de sus reyes ya muertos. Habitaré en medio de ellos para siempre.

“Cuando arrojen del templo sus abominaciones y fornicaciones. La idolatría a sus reyes. En ese tiempo Dios les asegura que habitará en medio de ellos para siempre”

2. Toda la casa, su alrededor y el monte será santísimo.

a. 43:10 Tú, hijo de hombre, muestra a la casa de Israel esta casa, midan el diseño de ellas y avergüencen de sus pecados.

b. 43:11 Si se avergüenzan de todo lo que han hecho, haz les entender el diseño de la casa, su disposición, sus salidas y sus entradas. Todas sus formas, todas sus descripciones, todas sus configuraciones, y todas sus leyes; descríbelo delante de sus ojos, para que guarden toda su forma y todas sus reglas. Y las cumplan, para hacerla por obra.

c. 43:12 Esta es la ley de la casa: Sobre la cumbre del monte, el recinto entero, todo en derredor, será santísimo. Mira, esta es la ley de la casa que les he dado.

D. Ordenanzas del altar.

1. Las medidas del altar.

a. 43:13 Las medidas del altar son en codos y en palmo menor: La base, de un codo de alto y un codo de ancho. Y la parte sobresaliente de su borde alrededor, de un palmo. Este será el zócalo del altar, para protegerlo de daños y desgastes.

b. 43:14 Desde la base, sobre el suelo, hasta el lugar de abajo, dos codos, y la anchura de un codo. Desde la cornisa menor hasta la cornisa mayor, cuatro codos, y el ancho de un codo.

c. 43:15 El altar era de cuatro codos, y encima del altar había cuatro cuernos.

d. 43:16 El altar tenía doce codos de largo, y doce de ancho por cuadrado a sus cuatro lados.

e. 43:17 El descanso era de catorce codos de longitud y catorce de anchura en sus cuatro lados. Y de medio codo el borde alrededor. La base de un codo por todos lados. Y sus gradas estaban al oriente.

2. El altar es para ofrecer holocausto y rociar sangre.

a. 43:18 Me dijo: Hijo de hombre, así ha dicho Jehová el Señor: Estas son las ordenanzas del altar el día en que sea hecho, para ofrecer holocausto sobre él y para esparcir sobre él sangre.

3. La sangre se pondrá en los cuernos del altar.

a. 43:19 A los sacerdotes levitas que son del linaje de Sadoc, que se acerquen a mí, dice Jehová el Señor, para ministrar ante mí, darás un becerro de la vacada para expiación.

b. 43:20 Tomarás de su sangre, pondrás en los cuatro cuernos del altar, en las cuatro esquinas del descanso, y en el borde alrededor; así lo limpiarás y purificarás.

4. La expiación por el altar.

a. 43:21 Tomarás luego el becerro de la expiación, y lo quemarás conforme a la ley de la casa, fuera del santuario.

b. 43:22 Al segundo día ofrecerás un macho cabrío sin defecto, para expiación; y purificará el altar, como lo purificaron con el becerro.

c. 43:23 Cuando acabes de expiar, ofrecerás un becerro de la vacada sin defecto, y un carnero sin tacha de la manada.

d. 43:24 Los ofrecerás delante de Jehová, y los sacerdotes echarán sal sobre ellos, y los ofrecerán en holocausto a Jehová.

e. 43:25 Por siete días sacrificarán un macho cabrío cada día en expiación; asimismo sacrificarán el becerro de la vacada y un carnero sin tacha del rebaño.

f. 43:26 Por siete días harán expiación por el altar, lo limpiarán, y así lo consagran.

g. 43:27 Acabados estos días, del octavo día en adelante, los sacerdotes sacrificarán sobre el altar sus holocaustos y vuestras ofrendas de paz; y serán aceptados, dice Jehová el Señor.